Cada uno tenemos un género de juegos que nos agradan más. En casa, en verdad, tenemos gustos tan dispares que no siempre y en toda circunstancia es simple decidir a qué jugamos por el hecho de que lo que le agrada a uno no tiene porqué ser lo que le agrada al de al lado. Llegamos a ententes cordiales mas claro… no es tan simple como me agradaría.
A mí me agradan normalmente los juegos veloces por el hecho de que no tengo demasiada paciencia. La única salvedad son los que tienen un componente de rompecabezas que sencillamente me chiflan. Asimismo es a los que más juego con mi móvil ¡me chifla solucionar entuertos! El día de hoy os recomiendo Skyline que es un juego de Cayro Games cuya mecánica lo hace excelente para gente como yo.
Skyline es un juego de lógica en el que nos proponen una serie de retos que debemos solucionar. Puede jugarse desde los cinco años mas a mí me semeja un juego muy entretenido asimismo para adultos como .
Este es el contenido de la caja. Como veis podemos localizar una serie de tarjetas con los retos, unas regletas numeradas del #1 al #4 y las piezas con las que se juega que son por determinado espectaculares. Son de madera pesada y están hermosamente decoradas con unos dibujos que simulan una urbe.
¡Ojo! Las piezas no son iguales por los 2 lados, lo que es singularmente determinante en el caso de las piezas que tienen formas irregulares.
La mecánica es fácil. Debemos reproducir los retos que nos presentan en las tarjetas con las piezas que tenemos mas ¡cuidado! se trata de reproducir el skyline con lo que no puede haber edificios desorganizados o bien piezas que no toquen el suelo. No podemos poner un vehículo en el aire por servirnos de un ejemplo o bien un edificio dado la vuelta.
Es de ahí que que la fotografía que veis acá, cuando menos por este lado, sería incorrecta. Por el otro lado estaba bien. De esta manera, como aparece acá abajo, es como estaría bien resuelto
A veces los desafios nos dan pistas y nos afirman qué piezas tenemos necesariamente que emplear. Como veis, los retos están graduados. Cuanto más grande es la base más difícil es ¡y hay ni más ni menos que ochenta!
Es un juego para jugar solo o bien en parejas. Si os agradan los rompecabezas, la lógica y la concentración es un juego con el que os lo vais a pasar bien.
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