La depresión es una afección médica grave que puede afectar de forma negativa la capacidad de un pequeño para conectar con amigos y familiares, para gozar de las actividades cada día normales, acudir a la escuela y concentrarse. En suma, gozar de la niñez. Un buen diagnóstico y un plan de tratamiento son un buen inicio. Mas superar la depresión precisa de tiempo y puede haber recaídas en el proceso. Para asistir a los hijos con depresión es útil saber qué aguardar a lo largo del proceso, y en qué momento es preciso buscar ayuda auxiliar.
Como progenitores, se ha de estar dispuestos para enfrentar cualquier inconveniente, sea este grande o bien pequeño. Esto incluye cuidar la salud mental de los hijos. Si se ve que la actitud de un hijo cambia, es esencial dar un paso al frente para abordar la situación adecuada y positivamente. A lo largo de la niñez y la adolescencia se pueden tener capítulos depresivos mayores, con lo que hay que estar alarma frente a las señales. Si sospechas que tu hijo o bien hija puede estar ensayando depresión, veremos ciertos pasos que se pueden proseguir.
Entender los síntomas de la depresión
Para los adultos, la característica definitoria de un episodio depresivo mayor incluye un estado anímico deprimido prácticamente todos los días a lo largo de un periodo de un par de semanas. Mas los pequeños, lo que más experimentan es irritabilidad. No obstante, hay otros síntomas o bien señales de la depresión a los que prestar atención:
- Irritabilidad, tristeza, retraímiento o bien hastío la mayoría del tiempo
- No goza con las actividades diarias
- Duerme demasiado o bien muy poco
- Aumento o bien pérdida de peso
- Se siente agobiado o bien desamparado
- Dificultad para concentrarse o bien tomar decisiones
- Fatiga
- Pensamientos de muerte o bien suicidio
Cómo tratar la depresión para asistir a tus hijos
El tratamiento para la depresión puede ser largo y, en ocasiones, implica prueba y fallo. No hay 2 pequeños iguales y es esencial ser paciente con el proceso para poder asistir a que tu hijo se sienta seguro. Veremos formas con las que abordar la depresión.
Educación para asistir a los hijos con depresión
Educar a los hijos sobre qué es la depresión es el primer y más esencial paso. Esto puede asistir a tus hijos a entender mejor las posibles causas, así sea por genética, factores ambientales, intimidación, agobio, etc. Asimismo les ayuda a entender la química del cerebro y reducir la auto culpa por sentirse de este modo, puesto que se sienten deprimidos por tener niveles bajos de serotonina.
La educación, y la entendimiento de que la depresión es una enfermedad que se puede superar, normaliza lo que pasan tus hijos. Esta normalización va a hacer que se sientan menos reluctantes a buscar ayuda profesional para solventar su inconveniente.
Psicoterapia para asistir a los hijos con depresión
Tener un profesional de la salud mental es una alternativa para los pequeños que luchan contra la depresión. Existen diferentes géneros de terapias psicológicas y lo que marcha para uno puede no marchar para otro. Para la depresión infantil, la terapia de juego es la opción más viable. En cambio, para los pequeños mayores y adolescentes, la terapia cognitivo conductual puede resultar más eficiente.
Puede llevar tiempo hallar la mejor combinación entre paciente y terapeuta. Si tienes dudas, no vaciles en llamar y consultar al terapeuta. Tú conoces mejor a tus hijos, y el trabajo ordenado entre el sicólogo y es fundamental.
Los fármacos para complementar la psicoterapia
Los fármacos pueden ser precisos para los casos que van de moderados a graves. Suelen dar mejores resultados cuando se combinan con la terapia. Además de esto, el tomar medicación señala que el inconveniente es grave, por consiguiente lo común es que esta medicación esté de manera estrecha supervisado por el médico que la prescribe.
También es esencial saber que merced a la supervisión del médico, la medicación va a ir mudando conforme la evolución del paciente. Esto es, le medicación va a ser absolutamente adaptada, se amoldará al estado del paciente. Si mejora, se reducirán las dosis, y si en algún instante empeora, entonces se va a aumentar lo preciso.
La hospitalización como último recurso
La hospitalización es la opción mejor para los casos más graves de depresión, incluyendo los que tienen pensamientos recurrentes sobre el suicidio, o bien intentos de suicidio errados. Estos casos de depresión mayor han de estar observados continuamente en un espacio seguro donde no puedan hacerse daño a ellos mismos. Además de esto, en el centro de salud se cercioran de que se tomen la medicación precisa apropiadamente.
En los centros de salud asimismo ofrecen terapia sicológica a los pacientes de salud mental. Por lo tanto, en el centro de salud los pacientes tienen todos y cada uno de los tratamientos posibles para apresurar su mejora y que puedan regresar a su hogar cuanto antes. Con la terapia, la medicación y la supervisión incesante de los médicos, el centro de salud es el entorno más seguro para los pacientes depresivos con tendencias suicidas.
Estrategias para poder asistir a los hijos con depresión en casa
Aun con fármacos, no hay una solución veloz para la depresión. El proceso de superación de esta enfermedad puede ser largo y complicado, no solo para el paciente sino más bien asimismo para sus personas más próximas. Por este motivo, el apoyo de la familia en casa es principal para poder vencer a la depresión. Veamos unos consejos para aplicar a la vida diaria del hogar:
- Fomentar el ejercicio a diario. No es preciso apuntarlo a un gimnasio o bien deporte si no desea, con dar un camino en compañía de su familia es suficiente. Pasear es un ejercicio muy ventajoso para la psique, y en compañía mucho mejor.
- Supervisar los fármacos en casa. En especial si tus hijos los toman, es esencial no dejarles con esa enorme responsablidad. Controlando que toman su medicación apropiadamente, no solamente les ayudas a no saltarse tomas, sino vas a estar más apacible, o bien apacible, al saber que lo hacen bien.
- Fomentar la comunicación. El terapeuta va a ayudar a tu hijo a empezar a abrirse y a verbalizar sus sentimientos. El trabajo de los progenitores en casa va a ser escucharle y dar el apoyo preciso cuando tu hijo desee charlar sobre de qué manera se halla.
- Cuidar la alimentación. Comer de forma saludable, como generalmente un modo de vida sano, puede asistir a que se responda mejor no solo a la terapia sino más bien asimismo a la medicación.
Los pequeños y los adolescentes no son «mini adultos”. Se están desarrollando y cambian a un ritmo veloz, aun cuando tienen depresión. Los síntomas pueden acentuarse o bien reducir a lo largo del tratamiento. Va a haber muchos avatares, días que parezca que avanza mucho, y otros que recule considerablemente más. La irritabilidad, el sentirse apabullado y los raptos son comunes en los pequeños deprimidos, y los progenitores deben sostener la calma y oír activamente lo que afirma el pequeño.
La tendencia natural de los progenitores es apreciar solventarlo o bien detenerlo lo antes posible, mas la enfermedad mental es un tema complicado. No se puede solventar ni detener. No obstante, puede prosperar. Con el tratamiento y los apoyos convenientes, los pequeños deprimidos prosperan y pueden regresar a gozar su niñez nuevamente.