Para cualquiera que no ha pasado por esta razón, saber de qué manera es el parto es una cosa que puede crear mucha curiosidad. Si bien cabe decir que cada parto es absolutamente diferente, único y singular, existen ciertas coincidencias que se comparten de forma general. La más esencial es que indudablemente, el instante del parto es la cita más esencial de la vida de cualquier mujer, por el hecho de que al acabar, vas a conocer a la persona más esencial de tu vida.
El parto puede ser larguísimo o bien cortísimo, jamás se sabe y por esta razón lo mejor es no tener altas esperanzas. Puedes hacerte un plan, puedes meditar de qué manera te agradaría que fuera, charlar con tu ginecólogo y trazar un posible plan para tenerlo todo algo más controlado. Mas la verdad es que una vez llegado el instante, todo puede mudar súbitamente, por lo que es esencial que estés dispuesta para cualquier circunstancia que pueda darse.
En qué consiste el parto
El parto se divide en 3 fases que son, la dilatación, el periodo expulsivo y el alumbramiento. El proceso puede alargarse a lo largo de muchas, muchas horas, si bien no es una regla, puesto que en todos y cada caso las circunstancias van a ser absolutamente diferentes. En todo caso comienza con la dilatación del cuello del útero, que ocurre cuando se generan las contracciones de parto.
Aunque posiblemente aguardes romper aguas como ocurre en las películas, esto no siempre y en todo momento es el desencadenante del parto, si bien sí lo condiciona. Esto es, en el momento en que se rompe el saco amniótico y se comienza a perder el líquido, el bebé deja de percibir nutrientes. Por otro lado, el saco amniótico puede romperse o bien padecer una grieta mucho antes que el bebé esté listo para nacer. Y es por esta razón que en ese instante se debe asistir al centro de salud a fin de que los especialistas valoren si es preciso iniciar con el trabajo de parto o bien no.
Por lo tanto, el parto empieza con las contracciones y ensanchamiento o bien dilatación del cuello del útero y acaba con la expulsión de la placenta. Entre medias de todo este proceso, llegará el instante de traer al planeta al bebé y acabará con el alumbramiento. ¿Deseas saber algo más sobre lo que pasa en todas y cada una de las fases del parto? Te lo contamos todo a fin de que puedas hacerte una idea de de qué manera va a ser tu parto.
El periodo de dilatación
Esta es la fase más larga de todo el parto, en la mayor parte de los casos. El periodo de dilatación puede alargarse a lo largo de muchas horas, por el hecho de que es preciso que el cuello del útero dilate hasta los diez centímetros a fin de que la cabeza del bebé tenga la posibilidad de salir. Tu médico te va a dar indicaciones sobre de qué manera y en qué momento debes asistir al centro de salud una vez empiezan las contracciones, por esta razón, es fundamental efectuar el curso de educación maternal.
La fase de expulsivo
Después de mucho esmero, dolor de contracciones y un proceso por lo general largo, llega el instante más singular de todo el parto. La fase de expulsivo o bien los pujos para dar a luz. Ahora ya vas a estar dilatada de diez centímetros y estarás dispuesta para comenzar a empujar. La ginecóloga o bien comadre va a ser quién determine si ya ha llegado el instante y te va a explicar de qué manera lo debes hacer.
El alumbramiento
El parto acaba con el alumbramiento, que es como se conoce al proceso de expulsión de la placenta, los restos del cordón y las membranas que unían el saco amniótico a tu cuerpo. El alumbramiento empieza cuando nace el bebé y acaba cuando tu cuerpo expulsa todo lo mentado. Este proceso aún puede alargara a lo largo de un buen tiempo, si bien si el parto transcurre con normalidad, seguramente lo vas a pasar con tu bebé para favorecer que tu cuerpo prosiga con la fase expulsiva. Algo que ocurre merced a la oxitocina, que es la hormona que genera las contracciones.
Estos son las fases del parto y de qué manera acostumbra a trascurrir el proceso desde el momento en que empiezan las contracciones de parto, hasta el momento en que acaba con el alumbramiento. Si bien es muy normal que produzca preocupación y miedo, debes confiar en la capacidad de tu cuerpo, que indudablemente, te sorprenderá.