Motivar a un pequeño a leer por su cuenta es la garantía de que creas un hábito saludable. Pues la lectura es una de esas cosas que si no se logran desde la niñez, cuesta mucho inculcar en la adolescencia o bien en la edad adulta. Para los pequeños, la mayor parte, la lectura está asociada a las labores de la escuela y en consecuencia, se trata de una obligación.
Por ello, es fundamental inculcar hábitos de lectura entretenida desde casa. De manera que los pequeños puedan descubrir el placer de leer sin que sea una obligación. Pues, que la lectura es un hábito esencial para los pequeños, es una cosa que ya se sabe. Los libros les asisten a descubrir el planeta de una manera diferente, aprenden léxico y amplían sus horizontes.
Cómo hacer que un pequeño lea por su cuenta
Sin embargo, no todos y cada uno de los progenitores y las madres saben de qué forma motivar al pequeño a leer por su cuenta. Tal vez por el hecho de que el hábito de la lectura no está tan establecido en los adultos como debería. Pues ya se sabe que la mejor forma de instruir a los hijos es mediante la imitación. Esto es, si tus hijos no ven que sus progenitores leen por placer, de forma frecuente, difícilmente van a sentir la curiosidad de coger un libro.
A continuación te contamos ciertos trucos y consejos que vas a poder aplicar en casa con tus hijos. Pequeñas acciones que te van a ayudar a enseñarles a tus hijos que leer es entretenido, que es una actividad inigualable. Pues cuando uno descubre la grandiosidad de los libros, se convierte en un pasión que te acompaña durante toda la existencia. Y con esto llevas el primer consejo, sé el mejor ejemplo para tus hijos.
Aprenden por imitación, sé un ejemplo
Los pequeños aprenden por imitación desde exactamente el mismo instante de nacer. Medran mediante sus progenitores y adultos de referencia. Recrean cada cosa que hacen y de esta forma, van descubriendo el planeta hasta el momento en que tienen la capacidad de avanzar por ellos mismos. Por esta razón es tan esencial ser un buen ejemplo para los hijos, por el hecho de que el comportamiento que tengan los progenitores, se va a ver recreado en los hijos en algún instante.
Muchos adultos dejan de leer por carencia de tiempo, o bien tal vez, por no saber localizar un hueco día a día para gozar de una buena novela. Esta es tal vez la mejor ocasión para reanudar esa afición, si bien sea por asistir a un pequeño a leer por su cuenta. Si tu hijo ve que día a día coges un libro, va a sentir la motivación por descubrir qué es lo que hace que leas cada día. Comparte ese tiempo de lectura con los pequeños y vas a crear un hábito saludable para toda la familia.
Un rincón de lectura
Es fundamental que los pequeños tengan su rincón de lectura amoldado, de manera que resulte alcanzable a la par que atractivo. Tener los cuentos en cualquier sitio, es de todo menos motivador. En cambio, si los pones que se vean bien en una estantería infantil, con una zona donde sentarse a leer y una esquina que invite a la concentración, los pequeños se van a sentir motivados por ponerse a leer por su cuenta.
Deja que el pequeño elija sus libros
Para que un pequeño sienta la motivación de leer por su cuenta, debe sentir que no se trata de una obligación. Esto es, en la escuela le mandan libros para leer y es una labor del cole. En casa, el pequeño debe elegir su libro a fin de que de esta forma tenga la ocasión de leerlo cuando desee. Sin hacer un resumen y sin tener más obligación que el placer de descubrir de qué va la historia.
Lleva a tus hijos a la biblioteca, a una librería de distrito donde puedan ver los cuentos, los títulos y las portadas de los cuentos. Deja que escoja un cuento nuevo cada vez, de esta forma cuando lo concluya, vas a poder reiterar la visita a la librería y va a tener la ocasión de elegir otro libro. Esta en sí, es una motivación más para leer, puesto que el camino en familia, ver y escoger cuentos y llevar el escogido, se transformará en una nueva tradición familiar.