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De qué manera coger adecuadamente el lapicero

2 enero, 2022

¿Tu hijo aprende a redactar? Una de las primeras cosas a tener y también cuenta a fin de que le resulte más simple aprender a redactar es que sepa sostener el boli o bien el lápiz adecuadamente.

¿Cómo se debe coger el lapicero correctamente y de qué manera puede asistir a los pequeños a prevenir el «trastorno» de comenzar a redactar? La Dra. Angela Zerbino, especialista en logopedia, explica los mejores pasos a continuar.

Tal como comenta Zerbino, el aprendizaje de saber coger bien el lapicero no tiene por el hecho de que hacerse en todos y cada uno de los pequeños al tiempo. Cada pequeño tiene una velocidad de aprendizaje y en ocasiones van más veloz en unos aspectos y más lentos en otros. Se debe hacer siempre y en toda circunstancia con respeto y poco a poco. De este modo se disminuye el peligro de disgrafia.

1. Coger el lapicero de forma correcta

Los pequeños no aprenden a coger los lapiceros correctamente desde el primero de los días. En verdad acostumbra a haber unos pasos ya antes no aprenden a hacerlo bien. Ahora os explicamos cuáles son estas etapas :

  • Inicialmente, emplea la mano, sujetando el lapicero con toda la palma de la mano (sin emplear los dedos). Esto limita los movimientos del pequeño y el campo de visión de la marca que haga en la hoja. Hace movimientos bruscos y no ve el resultado de lo que hace hasta el momento en que levanta la mano.
  • El segundo paso acostumbra a ser inclinar el codo. Esto le deja hacer más pluralidad de líneas por el hecho de que mueve todo el antebrazo.
  • Normalmente, el próximo paso es ya coger de forma gradual el lapicero con los dedos.
  • Finalmente, llega a la oposición índice-pulgar con la que logra un control de aquello que desea dibujar. Por norma general, acostumbran a mantener lateralmente el boli con el dedo medio. El agarre de pinza, a unos dos cm de la punta, representa el agarre correcto que debe lograr el pequeño.

2. La postura

La postura adecuada para observar y educar al pequeño a coger el lapicero es:

  • pies apoyados en el suelo,
  • sentado con comodidad,
  • torso erguido y levemente inclinado cara adelante, mas no apoyado en la mesa,
  • hombros relajados,
  • ambos codos encima de la mesa,
  • la mano que no escribe ha de estar «descansando», abierta sobre el papel (de esta manera sostienen la hoja) y bajo la mano que escribe.

3. Evita las «alteraciones» cuando esté escribiendo

La presión ejercida o bien la manera de coger el lapicero son determinantes para una adecuada ejecución gráfica. Muchos pequeños no lo terminan de hacer bien y lleva a un agarre disfuncional, haciendo que no sepan redactar o bien dibujar. Esto se puede y debe solventar.

Coger el lapicero con los dedos en forma de «pinza plana»

La falta de flexión de los dedos pulgar y también índice que ocurre cuando los pequeños cogen el lapicero con los dedos rectas, sin flexionar (planos, tal y como si fuesen una pinza de tender la ropa) conduce a una falta de fuerza motora y también inestabilidad del lapicero.

Escribe desde arriba de la línea del dibujo o bien la letra

También se debe corregir la tendencia a dibujar fuera de la línea del dibujo. Esto ocurre por el hecho de que flexiona mucho la muñeca cara adentro. Es más frecuente en el caso de los pequeños zurdos. Se puede solventar doblando la hoja cara la derecha.

padre pintando con sus hijos en el comedor de casa

Presiona la hoja demasiado fuerte

En cuanto a la presión que se ejercita sobre la hoja, si ves que es excesiva, puedes poner un cartón bajo la hoja o bien usar papeles muy finos a fin de que se rompa si el pequeño presiona mucho. De esta manera se va a dar cuenta de la fuerza que hace y va a poder regularlo hasta conseguir que no se rompa la hoja.

Presiona la hoja demasiado poco

Por el contrario, si no coge bien la hoja se puede poner una hoja de papel de lima o bien una superficie irregular bajo la hoja que utilice para pintar para acrecentar la resistencia a los movimientos de escritura. De todas y cada una formas, se le debe señalarse que intente poner más presión a fin de que no necesite poner ese «plus» bajo el papel que pinte.

4. Ejercicios

Es esencial entrenar un desarrollo armónico de la motricidad global, la motricidad fina, el esquema anatómico, la orientación espacial y la coordinación del oculocontrol desde el jardín de niñez. A continuación os mostramos ciertos ejercicios para plantear a los pequeños que les van a ayudar en este camino:

  • Ejercicios globales: lanzar y apresar una pelota, ejercicios de conciencia anatómico, etc.
  • Motricidad fina: cortar con tijeras, continuar laberintos con un lapicero, prensión digital de objetos, etc …
  • Ejercicios de coordinación óculo-manual: unir 2 puntos, sostener el lapicero en el punto izquierdo y la mirada fija en el punto derecho donde debe terminar el lapicero, hacer una línea recta (de esta manera son los ojos los que aprenden a guiar la mano y no del revés).
  • Ejercicios pictográficos y de dibujo.
  • Ejercicios de trazados rectilíneos y geométricos.
  • Ejercicios pre – gráficos: movimientos circulares, movimientos de guirnaldas, etc …

5. Las herramientas que se empleen asimismo son importantes

Inicialmente es mejor usar lápices triangulares, ergonómicos y grandes. De esta manera tienen la manera de los tres puntos de apoyo (pulgar, índice y medio). Existen gomas que se ponen en los lapiceros y que tienen esta forma.

El pequeño ha de ser capaz de usar diferentes materiales (pincel, tizas, lapiceros) para probar las diferentes sensaciones táctiles y las diferencias de presión que requiere cada uno de ellos de ellos.

6. Pequeños zurdos

Todo lo que hemos dicho se aplica asimismo a los zurdos. Aun las gomas que se pueden incorporar a los lapiceros, existen tanto para diestros para zurdos.