«Nuestra boda inicial era el veintiocho de marzo en una finca en las afueras la capital española y con doscientos cincuenta convidados, un par de semanas ya antes de la boda recluyeron todo el país por el Covid, asique postergamos la boda al treinta y uno de octubre pensado que para entonces ya todo estaría solucionado, mas nada pero lejos de la realidad, justo ese día fue el pico de contagios de la segunda ola y 3 semanas ya antes recluyeron la localidad donde se hallaba nuestra finca. Tras tantos meses de inseguridad y sofocación aguardando ese instante decidimos que deseábamos proseguir adelante con nuestro sueño, y en menos de 3 semanas planeamos una nueva boda absolutamente diferente, redujimos la lista a cincuenta convidados y escogemos el Four Seasons por su espectacularidad, y no nos equivocábamos»
Así se conocieron…
«Nos conocimos en la ciudad de Londres, (Clara) hice una celebración para festejar mi aniversario y un amigo me pregunto que si podía traer a 2 personas pero y una de ellas fue Gorka. Desde ese veinticinco de abril de dos mil quince no nos hemos vuelto a separar. Supongo que fue amor a primer aspecto.. jejej»
Así fue la pedida…
«La pedida fue el ocho de marzo de dos mil diecinueve. Un lluvioso día habitual de la ciudad de Londres. Gorka me solicitó que le fuera a buscar al trabajo que tenia una sorpresa para mí. Cuando llegué me llevo a un Pub súper miserable de la ciudad de Londres y la verdad que me quede un tanto chafada por el hecho de que creí que me íbamos a hacer un plan pero singular. Cuando llego la hora de cenar le pregunte que si teníamos cuando menos una reserva en algún restaurant y me afirmó que no le había dado tiempo a preparar nada por el hecho de que había estado muy liado con el trabajo.
Yo comencé a buscar restaurants próximos para cenar y mientras que lo cara llego un taxi y Gorka me afirmó que subiese que ahí estaba la sorpresa. Me llevó a un restaurant ubicado en la construcción The Shard, la torre alta de la ciudad de Londres. Nos dieron una mesa en frente de la Ventado donde se podía ver toda la urbe. En el postre sacó el anillo. Fue increíble!»
Clara y Gorka se casaron en la iglesia San José de la Montaña y efectuaron la celebración en el hotel Four Seasons. Para su gran día, la novia eligió a la diseñadora Alejandra Valero, su ramo era de La Sastrería de las Flores y su tocado de Mimoki. Su maquillaje fue obra de Regina Capdevila. El traje del novio se lo hizo su amigo y sastre Manuel Molina con un detalle muy especial: un bordado de la data de la boda en el interior y el chaleco forrado con una camiseta del Real Sociedad, equipo de futbol del novio.
Todas las fotografías son de Instantánea y Toma Primera.
