Cortar uñas a un bebé

Cuándo recortar las uñas a un bebé es una de las preguntas que más se hacen todos y cada uno de los progenitores y madres primerizos. Los cuidados y la higiene del bebé causa mucho desconcierto, por el hecho de que es tan pequeño que semeja que cualquier cosa le puede hacer daño.

Mantener sus uñas cortas y bien cuidadas es esencial, puesto que en caso contrario el bebé puede rasguñarse y hacerse daño. Para recortar las uñas a un bebé, hay que usar herramientas diseñadas particularmente para los pequeños y de esta manera, vas a tener la calma de utilizar un material sin peligro para la piel del bebé.

Cortar las uñas a un bebé, en qué momento hacerlo

Las uñas del recién nacido son muy enclenques y están muy pegadas a su piel, por este motivo, es recomendable aguardar por lo menos 3 semanas para eludir hacerle daño al cortarlas. Al llegar por mes de vida más o menos, las uñas comienzan a ser más resistentes y pueden cortarse con menor peligro de hacer daño en la piel del bebé. Hasta ese momento, no es preciso cubrir sus manitas para eludir que se haga daño.

Lo mejor es dejar sus manos en libertad a fin de que pueda descubrirlas y comenzar a gozar del sentido del tacto. Si bien son frágiles y puede hacerse pequeños cortes, no van a ser más que ligeras heridas superficiales sin relevancia. Es preferible dejar que se pueda rasguñar ya antes de utilizar guantes con los que el bebé no va a poder gozar del placer de descubrir sus manos.

Por lo tanto, a el interrogante de en qué momento recortar las uñas a un bebé, la contestación sería desde el primer mes de vida más o menos. Sin embargo, cada bebé es diferente y hay que observarle para saber qué es lo mejor en todos y cada caso. Lo que sí es fundamental es que el bebé tenga siempre y en toda circunstancia las manos muy limpias, de esta manera si bien se pueda hacer algún raspón, no va a correr el peligro de que se pueda inficionar.