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Porteo: la mejor forma y más segura de llevar a tu bebé

8 junio, 2022

Actualizado en el mes de mayo 2022


Jade Magdaleno Matrona

Escrito por Jade Magdaleno

Matrona y sexóloga


Aunque desde el principio de la humanidad en todas y cada una de las etnias se ha cargado a los bebés en brazos o con dispositivos diseñados para tal fin, hoy en día prosigue habiendo quienes ven el porteo como una moda, asociada a un estilo específico de crianza.

Lo es cierto que portear tiene probadas ventajas para el bebé y para quien lo portea. Por eso, hoy deseo explicarte qué es el porteo y darte todas y cada una de las claves a fin de que decidas si es el procedimiento más conveniente para ti y tu bebé.

Qué es el porteo

Mamá porteando bebéPortear un bebé es cargarlo en brazos. Para facilitar que esto pueda hacerse en una postura adecuada para el bebé, más cómoda para quien lleva y, además de esto, permitir la enorme ventaja de dejar las manos del adulto libres, se han desarrollado diferentes dispositivos de porteo, para cada una de las distintas etapas de crecimiento, pudiendo emplearse desde el nacimiento, hasta pasados múltiples años.

Beneficios del porteo

Para quien portea:

  • Cuando se tiene un bebé, la sola idea de poder tener los brazos libres y así atender las labores del hogar o hacer la adquisición sosteniendo el carro del súper ya suena fabulosa. Esa autonomía en el adulto es una de sus mayores ventajas.
  • Además, mejora el propio autoconcepto y la confianza en la capacidad para cuidar del bebé. Las tasas de depresión posparto son menores entre quienes llevan y la vinculación con el bebé, mayor.
  • Al estar en estrecho contacto, se advierten más precozmente las señales iniciales de apetito, por lo que favorece la lactancia a demanda.
  • Los estudios prueban que los dispositivos de porteo ergonómicos son respetuosos con la anatomía del bebé y con la espalda de quien lleva. Es más cómodo cargar a lo largo de horas a un pequeño usando un dispositivo ergonómico que los brazos.

Para el bebé:

  • Mayor sensación de seguridad y calma. El contacto estrecho facilita que sus necesidades sean cubiertas ya antes, potenciándose el vínculo y el apego.
  • Bebé durmiendoMejora del sueño y de la regulación de su temperatura y incesantes vitales. Aun en las UCI neonatales se usa el procedimiento canguro, consistente en llevar a los bebés ingresados, para prosperar su evolución y desarrollo.
  • Reduce drásticamente las molestias digestibles. La situación vertical evita el reflujo gastroesofágico y el movimiento les facilita expulsar gases y deposiciones. En las etnias occidentales, donde menos se lleva, es donde más incidencia de cólicos del lactante hay.
  • Tiene ventajas en su desarrollo óseo y muscular: evita la plagiocefalia, que es el aplanamiento propio de la cabeza del bebé que pasa demasiadas horas tumbado. Si se elige un dispositivo de porteo ergonómico, además de esto previene la displasia de caderas.

Las mochilas no provocan displasia de cadera

La displasia de cadera es innata y los bebés que la sufren, nacen con ella. Esto es, es anterior al uso de la mochila. No obstante, no aconsejo el uso de mochilas «colgonas» pues podrían agrabar una displasia preexistente.

Jade Magdaleno, partera y sexóloga

Cómo llevar correctamente

Hablamos de salud y seguridad para ti y tu bebé, por lo que debes descartar todos aquellos dispositivos no homologados. Ahora bien, encontrarás dispositivos homologados que no son ergonómicos.

Si no hay ergonomía, se resentirán tu espalda y la espalda y caderas de tu bebé. Su espalda va a quedar recta y sus piernas, estiradas cara abajo, formando una V invertida. Su peso recae en sus genitales.

Evita esta postura sí o sí

Es fundamental que el bebé no esté como “colgado” al estilo de los paracaidistas. Las piernas no pueden quedar en forma de paréntesis.

Dra. Marta Garín, pediatra

Si es ergonómico, su espalda va a quedar encorvada en forma de C y las piernas, de M, pues van a quedar abiertas, con las rodillas elevadas hasta la altura del culete o por encima. La lona del portabebés le va a llegar hasta la parte trasera de la rodilla, dejando que apoye su peso repartido entre el culete y las piernas.

Si estás encinta, va a ser más esencial aún la ergonomía y eludir un peso excesivo en el suelo pélvico y sobre el abdomen: elige portabebés que dejan cargar al pequeño en la cadera y/o en la espalda.

Dada la multitud de productos comercializados, es conveniente visitar un centro especializado de artículos de puericultura, eludiendo grandes superficies comerciales. Además de esto, es buenísima idea acudir a un curso de porteo.

Cuándo comenzar a llevar

Puedes portear a tu hijo prácticamente desde el nacimiento. Se aconseja esperar a que pese cerca de tres kg para asegurar que puede sostener la postura, mas desde ahí tienes de año en año de porteo por delante que desees (aproximadamente hasta el momento en que el pequeño pese unos veinte kg y prefiera pasear o hasta el momento en que decidas que no deseas hacerlo más).

La clave está en escoger el sistema de porteo adecuado. Por servirnos de un ejemplo, para llevar a un recién nacido, acostumbran a ser más cómodos y convenientes los fulares, pues le dejan estar más recogido y la lona se amolda plenamente a su forma.

Cuando medra y pesa un tanto más, en un fular quedaría colgando, así que suelo aconsejar emplear la mochila portabebés. Aún así, has de saber que hay mochilas que incluyen reductores concretos para recién nacidos, así que, si prefieres emplear este sistema de porteo, asimismo vas a poder hacerlo desde prácticamente el nacimiento.

Para escoger qué utilizar, realmente lo interesante es fijarse, no tanto en el peso ni en la edad del bebé, si bien nos sirven como referencia, sino más bien en la evolución de tu hijo. Cuando desarrolle la capacidad de sostenerse sentado por sí solo, es cuando va a estar listo para utilizar con absoluta naturalidad una mochila portabebés con asiento preformado.

Consejos para el porteo

  • Asegúrate de escoger un dispositivo homologado y ergonómico. Y aprende a utilizarlo bien, tanto para poner apropiadamente a tu bebé para que sea cómodo para ti.
  • Si no llevas desde el nacimiento, posiblemente tu bebé extrañe verse metido en un fular o una mochila. Daos tiempo hasta habituaros, pues, como todo, es un proceso.
  • No efectúes actividades que impliquen un peligro de caída o quemadura mientras que llevas, como ciertos deportes o cocinar o planchar.
  • Portea delante, no a la espalda, y con el bebé mirando cara ti, no al frente, cuando menos, hasta los seis meses. Desde los seis meses va a ser capaz de mantener su cabeza. Además de esto, hasta los ocho meses, el bebé no adquiere la permanencia de objeto: si no te ve la cara, pensará que no estás ahí. Además de esto, ir mirando al frente le puede suponer un exceso de estímulo.

Mirar cara adelante no es ergonómico

El bebé he de estar mirando cara ti y no cara adelante. En muchas ocasiones se lo pone mirando cara adelante y esa no es una postura ergonómica, aparte de ser causa de agobio para el pequeño por sobreestimulación visual, en especial a lo largo de los primeros seis meses.

Dra. Marta Garín, pediatra

Tipos de portabebés

Existen muchos géneros de portabebés diferentes que van a ser más útiles para unas situaciones u otras, así para las necesidades de tu bebé. Mas tanto si compras en internet como en una tienda especializada. Recuerda siempre y en toda circunstancia demandar homologación y ergonomía.

Fular

Se amolda a la perfección al desarrollo del bebé. Ten presente que los flexibles pueden dejarse puestos al sacar al bebé, y los de tejido no flexible, hay que ponerlos y atarlos toda vez que se saque al pequeño. Dejan multitud de situaciones y son muy cómodos, mas acostumbran a requerir cierto aprendizaje.

Los flexibles sirven para los primeros seis meses únicamente, los no flexibles dejan aguantar mayor peso, por lo que son convenientes para pequeños mayores. Hay tejidos suavísimas y frescos, como el bambú.

Lo más esencial es la buena postura

Si no te manejas bien con el fular, mi recomendación es que uses una mochila ergonómica pues te cerciorarás de que el bebé siempre y en toda circunstancia tenga una buena postura.

Jade Magdaleno, partera y sexóloga

Mochila ergonómica

Muy fácil de usar, mas menos graduable al desarrollo del bebé. Se venden modelos amoldados a prácticamente todas las edades, habiendo mochilas para pequeños desde recién nacidos y hasta cinco-seis años.

Elige una buena mochila

Es fundamental escoger bien la mochila, percibir un asesoramiento profesional y poder probarla. Pues, si bien una mochila sea buena y ergonómica, asimismo debes valorar que te sea cómoda y que puedas ponértela y quitártela sola de forma fácil.

Dra. Marta Garín, pediatra

Bandoleras

Para llevar de lado, sobre la cadera. Acostumbra a ajustarse con anillas. Son muy cómodas y simples de utilizar. Ciertas son de lona de reja, idóneas para temporadas calurosas. Pueden emplearse hasta los tres años, mas pueden resultar más incómodas para aguantar más peso, por lo que las aconsejaría para periodos cortos.

Pouch

Es una mezcla entre la mochila y la bandolera, no requiere el ajuste de esta última, por lo que es más veloz y fácil de utilizar. Válido para pequeños de entre dos meses y dos años.

Mei Tai

Es un híbrido entre la mochila y el fular, con los beneficios del fular, mas mayor sencillez de uso.

Colgonas

Son las mochilas no ergonómicas, ¡escapa de ellas! No las aconsejaría en ningún caso.

Cuánto tiempo se puede portear

Si el portabebés está bien desarrollado, el bebé puede estar en él todo el tiempo que deseemos. Solo debemos ir verificando que tenga una buena postura, que tenga buena transpirabilidad, que respire apropiadamente, que no tenga calor…

Dra. Marta Garín, pediatra

Conclusión

Hemos llevado a nuestros bebés desde el origen de nuestra existencia como especie, durante toda la historia y en cualquier cultura del planeta, ¡a ellos les chifla!

Tenemos gran pluralidad de portabebés que facilitan enormemente llevarlos a lo largo de horas cómodamente y segura. Y hay una alternativa idónea para la edad de tu bebé y tus necesidades.

El porteo es una alternativa muy práctica que te dejará atender ya antes las demandas de tu bebé mientras que haces otras labores o te desplazas. ¡Aun puedes amamantar mientras que llevas!

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