«The Element», de Ken Robinson, habla de la relevancia de hallar ese sitio donde una persona hace aquello que verdaderamente desea hacer, y donde es quien siempre y en toda circunstancia ha querido ser, pues es ahí donde va a poder dar lo mejor de sí. Y lo mejor es que jamás es tarde para hallarlo. Y siento que mi «elemento» es, indudablemente, acompañar a las mujeres en el camino cara su boda, ayudándolas a hallar su vestido perfecto. Comenta la diseñadora Lorena Merino. ¡Descubre hoy en el weblog los diseños para novias la Nueva Compilación Nupcial de Lorena Merino: Element dos mil veintitres!
«Descubrir tu pasión lo cambia todo»
Ken Robinson, The Element
La moda de los años setenta marcó indudablemente un ya antes y un después. Los cambios sociales producidos en los sesenta se instituyen claramente en la próxima década, una década de “revoluciones” que acabó con una estética tan marcada que, solo verla hoy día, nos retrotrae a esos setenta que influyeron tanto en la música como en el cine, y asimismo en la moda.
Es exactamente en esa temporada cuando, estimulado por la compleja coyuntura económica que afecta a la industria, el apogeo de la alta costura cede el paso al fenómeno del prêt-à-porter como generador de tendencias, la moda cambia y, en contraposición a las temporadas precedentes, se abandona el «look único» y muchas formas de vestir cohabitan a la vez.
Desde la calle brotan nuevos estilos ligados al apogeo de las tribus urbanas. Por una parte, como continuidad del movimiento hippie, se fomentan las prendas de tejidos artesanos. Desde mediados de esta década la estética punk portaestandarte por Viviene Westwood producirá asimismo una creciente influencia. Los trajes de corte masculino fomentan ese estilo ambiguo que encomia la actitud empoderada y polivalente de la mujer. Y no podemos olvidarnos del satén, las pailletes y los excesos que desfilaban noche tras noche en el mítico Estudio cincuenta y cuatro de la ciudad de Nueva York.
«The Element» consta de una serie de piezas que, de la misma manera que en compilaciones anteriores de Lorena Merino, buscan la utilidad, esa posibilidad de crear infinitas combinaciones y continuar su máxima de “un vestido para cada novia”.
Desde vestidos de líneas más fáciles muy favorecedores hasta otros con más personalidad, sobrevestidos, chalecos, una enorme pluralidad de mangas… todos elaborados con tejidos de enorme calidad, sus ya habituales bordados súper románticos, plisados artesanos… y además de esto, este año nos sorprenden con ciertas piezas más renovadoras como pantalones, pailletes, volúmenes y piezas joya que transportan de manera directa a los años setenta.
Más que jamás procuramos aproximar el estilo y la elegancia de la alta costura al planeta del prêt-à-porter nupcial. Una compilación para mujeres fuertemente, con garra, novias con estilo y personalidad que estén resueltas a gozar siempre y en toda circunstancia de todo en todos y cada instante.
Además, las novias de la capital de España están de enhorabuena, ya que inauguran un nuevo atelier en la calle Zurbano, 98, un espacio que invita a soñar.
¡Sueña hoy en el weblog con los fantásticos diseños de la Nueva Compilación Nupcial dos mil veintitres de la diseñadora Lorena Merino!
Vestidos: Lorena Merino | Fotografías: Sara Costa | Dirección y Comunicación: Rodolfo Mcartney / NoQuieroAgencia | Peluquería y maquillaje: MG Beauty | Zapatos: Mariela la capital de España | Pendientes: De la Riva Complementos | Tocados: Lamatte Shop | Video: Leo Da Vinci Weddings.