Saltar al contenido
Tienda de Unicornios Online

Estos son los nueve comportamientos que tienen los niños con una buena autoestima

22 agosto, 2023

Todos queremos que nuestros hijos tengan una buena autoestima, pero, ¿sabemos verdaderamente lo que implica tenerla? ¿Cómo retener si nuestro hijo tiene una buena autoestima?

Como veremos, una buena autoestima no es una autoestima perfecta; no significa no sentirse inseguro a veces, o no tener complejos. Significa reconocerlo y afrontarlo, y rebuscar igualmente todas las cosas buenas que somos.

Y es que, más allá de «quererse a uno mismo», este concepto de la inteligencia emocional meollo otros significados que tienen que ver con el autoconocimiento, la aprobación o la iniciativa, entre otros. Hablamos sobre nueve comportamientos que tienen los niños con una buena autoestima.

Nueve claves para reforzar la autoestima de los niños

1. Se conocen a sí mismos

Los niños con una buena autoestima gozan de un buen autoconocimiento; es asegurar, se conocen, saben lo que les gusta y lo que les hace felices, lo que no, con lo que se sienten cómodos, con lo que no…

Porque, para tener una buena autoestima, ayer tienes que conocerte a ti mismo (no puedes querer poco que no conoces). Sin incautación, aunque sepan cómo son, están en constante formación y descubrimiento de sí mismos (es poco que en existencia, dura toda la vida).

Para que los niños tengan una buena autoestima, ayer tienen que conocerse a sí mismos; es muy difícil querer poco que no se conoce.

2. Reconocen sus fortalezas

Por otro flanco, igualmente saben identificar admisiblemente cuáles son sus fortalezas, o sea, aquello que se les da admisiblemente, aquello en lo que destacan. Y aprovechan ese conocimiento para potenciar sus habilidades, para mejorar o para conseguir aquello que se proponen.

Así, a parte de rebuscar sus puntos fuertes (y de valorarlos), los utilizan para mejorar y ilustrarse, es asegurar, les dan un buen uso.

3. Se sienten orgullosos

Una buena autoestima igualmente tiene que ver con sentirnos orgullosos de nuestros logros, y rebuscar nuestro esfuerzo para obtener a ellos. Por ello, los niños con buena autoestima se sienten orgullosos de aquello que hacen admisiblemente (y igualmente se sienten importantes, para su comunidad, sus amigos…).

Son capaces de asegurar «¡qué admisiblemente me ha desencajado!», y de sentirse satisfechos por ello, sin quitarle importancia o atribuir sus logros a la suerte o a los demás (como ocurre en el síndrome del impostor, del que ya hemos hablado).

Seis señales que delatan falta de autoestima en los niños y claves para evitarlo

4. Perseveran

Son niños que, frente a las dificultades, perseveran. ¿Por qué? Porque se sienten seguros y capaces de hacerlo. No porque no tengan miedo a fracasar o a equivocarse, sino porque aceptan esa posibilidad, y aún así, luchan por conseguir sus objetivos.

Esto es señal de una buena autoestima; encomendar en los propios fortuna, afrontar las adversidades y seguir, a pesar de que a veces cueste (o que a veces «flaqueen»).

Otra señal de buena autoestima es encomendar en los propios fortuna, afrontar las adversidades y seguir, a pesar de que a veces cueste.

5. Piden ayuda

Tener una buena autoestima siquiera es parecido de «poder con todo». Al contrario, tener una buena autoestima significa rebuscar la vulnerabilidad, ser conscientes de que a veces solo no se puede y es bueno pedir ayuda.

Por eso estos niños son capaces de pedir ayuda cuando no pueden hacer las cosas solos o cuando, simplemente, la necesitan, y no les da vergüenza hacerlo.

Siete juegos para mejorar la autoestima de los niños

6. Tienen iniciativa

La autoestima está ligada a la seguridad personal, y por ello, estos niños suelen tener iniciativa a la hora de relacionarse (por ejemplo, les gusta conocer familia nueva y salir de su zona de confort), iniciar una conversación, abrir una actividad, replicar una pregunta en clase, proponer un articulación nuevo… Lo hacen porque tienen seguridad para ser ellos mismos y dar su opinión personal.

Así, el tener iniciativa es un atributo muy positivo, que adicionalmente les servirá para conocer otras realidades, ser más flexibles, etc.

7. Son valientes

En sarta con el punto precedente, son igualmente niños valientes. Esto no significa que no tengan miedo a ausencia, en tajante. Significa que, aunque tengan miedo, por ejemplo a hacer el ridículo, a no ser aceptados, a que se rían de ellos… aunque sientan ese miedo, esto no les para a la hora de llevar a cabo y de ser ellos mismos.

De hecho, ser fuerte siquiera significa serlo siempre, en todos los escenarios, pero sí significa ser capaces de afrontar esos miedos y de, aún así, probar a ver qué ocurre (en cierta forma, ponerse a prueba).

Cómo educar hijos con autoconfianza y valentía

8. Son flexibles

Como dice el psicólogo y Doctor en Psicología Walter Riso, «ser flexible es ser capaz de ser uno mismo». La flexibilidad mental es parecido de tolerancia mental, y es la tacto que permite adaptarse a los cambios y a las circunstancias y no verlo todo como «blanco o aciago». Es lo contrario de la rigidez.

Y esa flexibilidad alimenta la buena autoestima, porque el escuincle, al ser flexible, será capaz de ver que lo que hace mal no es tan malo, y que lo que hace admisiblemente, siquiera, lo que le permitirá ser realista pero positivo.

9. Todavía tienen inseguridades

Finalmente, y como decíamos en la ingreso, una buena autoestima no es una autoestima perfecta. No caigamos en el error de pensar que los niños con una buena autoestima siempre se sienten admisiblemente consigo mismos, o no tienen conflictos, inseguridades o dificultades.

Acoplado todo lo contrario, los tienen como cualquier otra persona, lo que cambia es su forma de afrontarlo o de convivir con ello. Aceptan sus defectos e inseguridades, los conocen, y aunque a veces les perjudiquen o no sepan gestionarlos, esto no les lleva a pensar que son poco válidos.

Foto | Portada (Freepik)