La oxitocina es conocida de una manera popular como la «hormona del amor» o «la hormona de la felicidad» y ha sido objeto de numerosos estudios científicos desde hace décadas. Aunque en un principio se llego a relacionar con el amor de la madre hacia su bebé, cada vez se descubren más funciones de la oxitocina en relación a los comportamientos de los seres humanos.
En el siguiente artículo vamos a hablarte de una manera detallada de las diferentes funciones que va a tener la hormona de la oxitocina en el cuerpo humano.
Qué es la oxitocina
La oxitocina es una hormona que se crea en la zona cerebral del hipotálamo. Se libera en la sangre y actúa como neurotransmisor en el cerebro, desempeñando un papel esencial en la regulación de funciones fisiológicas y comportamientos humanos. Tiene un papel clave en la reproducción y el parto, así como en la lactancia materna. Sin embargo hay que indicar que su influencia va mucho más allá de estos aspectos.
Por qué la oxitocina es la hormona del amor
Diversos estudios han podido constatar que durante los primeros meses de un noviazgo, el organismo va a segregar altos niveles de oxitocina. La actividad sexual entre dos personas también va a estimular la liberación de oxitocina en el organismo. También hay ciertas evidencias de que dicha hormona va a ayudar a que los espermatozoides puedan llegar al óvulo femenino.
Es por todo ello que es conocida de una manera popular como la hormona del amor. Unos niveles altos de esta hormona ayuda a conseguir cierta estabilidad de tipo emocional y a reducir los altos niveles de estrés y de ansiedad que pudiera tener una persona.
¿En qué parte del organismo se produce la oxitocina?
La hormona de la oxitocina se va a producir en la zona del hipotálamo en la glándula pituitaria. De manera principal, la secreción de dicha hormona va a depender en gran medida de la actividad eléctrica de las neuronas presentes en el hipotálamo, permitiendo que se libere al torrente sanguíneo cuando dichas células se excitan. La oxitocina presente en el cerebro va a actuar como un mensajero químico y va a tener un papel esencial en todo lo relativo al comportamiento en los seres humanos.
Las funciones de la oxitocina en el cuerpo humano
Son varias las funciones de la oxitocina dentro del organismo:
Regular el comportamiento de tipo social
Una de las funciones principales de la oxitocina es su participación en lo referente a la formación y mantenimiento de los lazos sociales. Se ha podido demostrar que niveles elevados de oxitocina están asociados a un aumento en la confianza, la empatía y la generosidad hacia las demás personas. Además, se cree que la oxitocina ayuda a reducir la ansiedad social y promueve la cooperación y la reciprocidad.
Vínculo madre e hijo
La oxitocina va a tener un papel fundamental en lo que respecta al vínculo existente entre madre e hijo durante el parto y la lactancia. La liberación de oxitocina a lo largo del parto va a facilitar las contracciones uterinas, ayudando a expulsar al feto. Además, la oxitocina estimula la secreción de leche durante la lactancia materna, algo que va a fortalecer el apego entre la madre y el bebé.
Reduce el estrés y la ansiedad
Se ha podido demostrar que la oxitocina permite reducir los niveles de cortisol, que es la hormona del estrés. La oxitocina por tanto, ayuda a reducir la ansiedad y el miedo en diversas situaciones como las consideradas estresantes.
Regula las emociones
La oxitocina también va a está implicada en lo que respecta a la regulación de las emociones. A niveles más altos de oxitocina, la persona va a tener una mayor capacidad para poder manejar el estrés emocional y regular las emociones negativas. Además, la oxitocina tiene una relación directa con el estado de ánimo de la persona en cuestión.
Efectos en el ámbito del sexo
Algunos estudios han podido probar que la oxitocina puede desempeñar un papel importante en el campo del sexo y en la respuesta orgásmica tanto en hombres como en mujeres. De esta manera, ha niveles más altos de oxitocina se va a producir una mayor satisfacción sexual y una mayor intimidad en las relaciones de pareja.
Facilitar el parto y la lactancia materna
La oxitocina va a desempeñar un papel crucial a la hora de facilitar el trabajo de parto al estimular las contracciones uterinas. Además, durante la etapa de la lactancia, la liberación de oxitocina promueve la producción de leche materna, lo que permite una buena alimentación del bebé.
Oxitocina y maternidad
La oxitocina es una hormona esencial y clave para la maternidad por diferentes motivos:
- Se trata de la hormona responsable de que se produzcan las contracciones y se dilate el cuello del útero durante el parto.
- Es la culpable de que la leche que se produce en las glándulas mamarias salga en el momento de que el bebé comience a succionar. Además de esto, la lactancia materna va a contribuir a que los niveles de oxitocina se eleven, algo que va a fortalecer el vínculo entre la madre y el hijo. Todo esto contribuye a que disminuya el riesgo de que la madre pueda llegar a sufrir depresión postparto.
- La hormona de la oxitocina va a ayudar a la madre a responder rápidamente a las distintas necesidades del bebé.
- La lactancia materna junto al contacto piel con piel con el bebé, va a provocar el aumento de los niveles de oxitocina en el organismo, mejorando los niveles materno-filial. Unos niveles altos de dicha hormona va a permitir que las mujeres puedan disfrutar de manera plena de la propia maternidad.
En definitiva, la oxitocina es una hormona que va a cumplir diferentes funciones en el cuerpo humano. Aunque se conoce sobre todo por participar de una manera activa en la reproducción y en el vínculo madre e hijo, también tiene cierta influencia en el comportamiento social, en la regulación del estrés y en la regulación de las emociones.